Es cierto, que el desarrollo del capitalismo se basa en el consumo de los individuos; además, se vio favorecido por el desarrollo tecnológico progresivo e interrumpido, basado en la aplicación de la ciencia y el empleo de la energía.
Un aspecto importante, es que quienes están a favor del Estado en la economía destacan, sobre todo la falta de sensibilidad social en los mecanismos del mercado respecto a problemas como la desigualdad de la distribución de la riqueza, así como el deterioro ambiental y la indiferencia de los mercados hacia la estabilidad de un crecimiento económico.
Así mismo, la organización que existe en los procesos productivos es un beneficio para la rápida circulación de información, como los intercambios comerciales entre las naciones. Pero, los Estados-nación sujetan a los mercados, mediante sus leyes y regla, establecidas por instituciones internacionales. Aunque, la globalización y el capitalismo son un claro ejemplo de desigualdad y pobreza en el mundo.
Además, de la revolución tecnológica a causa del capitalismo y, el gran consumismo de productos tecnológicos que se pueden conseguir y están al alcance de todos. Por ello, el surgimiento de la globalización que afecta a las grandes redes de comercio mundial, el sistema financiero y a la vida de cada individuo.
Sin embargo, cuando los Estados controlaban la economía, aplicaban medidas para proteger sus mercados contra la competencia y rehusaban cualquier forma de acuerdo con otros Estados. Surgió el concepto de Estado-nación. Pero, en la actualidad estos realizan alianzas o acuerdos, para obtener ventajas sobre otros, en el aspecto financiero y comercial.
Aunque, la cultura es esencial para el desarrollo de los diferentes sistemas y de los movimientos antisistémicos, producto de los primeros, pero cabe mencionar que no se pude luchar contra el sistema, porque siempre existirá.
Bibliografía:
WALLERSTEIN, Immanuel. Geopolítica y Geocultura, Editorial Kairós, Barcelona, 2007, 193-275 págs.
STEARLING, Bessy. Geografía Económica “La economía mundial”, Editorial Esfinge, México, 2008, 32-46 págs.
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